- El alquiler de habitaciones se regula por el código civil
- Cómo redactar el contrato para el alquiler de una habitación
- Aspectos fiscales de interés para el propietario
- Si alquila habitaciones en un apartamento en el que es inquilino, avise al propietario
- Un contrato de arrendamiento independiente para cada compañero de habitación
- Un contrato único para todos los compañeros de habitación
- Garantes
El alquiler de habitaciones a varios inquilinos se ha extendido durante los últimos quince años. Es un fenómeno que está ganando impulso y que se extiende a todas las edades y todas las categorÃas socio-profesionales. Atrayendo gente joven trabajadora, familias monoparentales e incluso personas mayores, esta forma de vida ahorra dinero compartiendo gastos, teniendo la oportunidad de vivir en una casa más grande y escapar de la soledad del hogar.
Se trata de una práctica extendida pero que suele generar dudas entre inquilinos y propietarios. Se puede definir como «el alquiler de la misma vivienda por varios inquilinos, constituyendo su residencia principal y formalizado por la celebración de un único contrato o varios contratos entre los inquilinos y el propietario».
El alquiler de habitaciones se regula por el código civil
El alquiler de habitaciones se regula por el código civil, a diferencia del alquilar de viviendas completas, que lo hace mediante la ley de arrendamientos urbanos (LAU). La principal implicación de este punto es que la duración del contrato del alquiler de una habitación será exactamente la que se pacte en el contrato, no habiendo derecho a prórroga por parte del inquilino como ocurre en el alquiler de una vivienda en su totalidad.
Otras particularidades del alquiler de habitaciones es que en caso de venta de la vivienda, el contrato de alquiler de la habitación podrÃa ser extinguido y que además el inquilino no tendrÃa derecho de adquisición preferente de la casa, lo que sà ocurre en el caso de que se quiera vender una vivienda alquilada Ãntegramente.
Cómo redactar el contrato para el alquiler de una habitación
El contrato entre inquilino y propietario es recomendable que quede reflejado por escrito. Para que no surjan después conflictos, debe estar firmado por ambas partes y recoger diferentes aspectos como:
- Qué habitación exactamente es la que ocupará el inquilino
- El precio y la forma de pago
- La duración del contrato
- Qué servicios se incluyen en el alquiler y cómo se repartirá el pago de los gastos extra que puedan haber
- Si el inquilino puede subarrendar o no la habitación. Según el código civil si el contrato nada indica, el inquilino sà podrÃa subarrendar a su vez la habitación.
Aspectos fiscales de interés para el propietario
El propietario debe declarar el beneficio que obtenga con el alquiler de la habitación en todo caso. Pero esto no significa que tenga que salir caro: el propietario podrá deducirse entre el 60% y el 100% del dinero obtenido tal como indica el artÃculo 23 de la ley 35/2006 del impuesto sobre la renta de las personas fÃsicas.
Si el propietario utiliza la vivienda como su residencia habitual y se desgrava el pago de la hipoteca, el alquilar una o varias habitaciones le implicará rebajar una parte de esta desgravación, la correspondiente a la parte proporcional de uso exclusivo de la vivienda por parte inquilino (según la consulta vinculante v1729-07 de la dirección general de tributos).
Aspectos fiscales para el inquilino
La parte negativa para el inquilino que sólo alquila una habitación y no toda la vivienda es que hacienda no lo considera alquiler de vivienda habitual y, por tanto, no permite desgravar por este concepto.
Si alquila habitaciones en un apartamento en el que es inquilino, avise al propietario
Si le gustarÃa arrendar una o más habitaciones de la casa en la que vive pero usted no es el propietario, tiene que contar con la autorización expresa del propietario de la vivienda, ya que realquilar la casa sin permiso es motivo de rescisión de contrato. Además, el propietario de la vivienda tendrá derecho a exigir una compensación por permitir el subarriendo de parte del inmueble.
Un contrato de arrendamiento independiente para cada compañero de habitación
El propietario puede optar por establecer varios contratos de arrendamiento por cada inquilino de la vivienda que luego firmarán individualmente su propio contrato. Los compañeros de cuarto son legalmente independientes el uno del otro.
En este contrato, el propietario debe estipular que otorga a cada compañero de habitación el derecho de disfrute exclusivo de ciertas habitaciones con acceso gratuito a las partes comunes de la vivienda.
Al igual que con un alquiler convencional, el contrato también establece que el titular debe comprometerse a pagar su parte del depósito y pagar su parte de la renta y los gastos al propietario. La duración del alquiler también puede variar de un inquilino a otro, y cada uno puede retirarse individualmente sin impacto para los demás.
Un contrato único para todos los compañeros de cuarto
Los compañeros de habitación firman un solo contrato y cada uno debe proporcionar los documentos de respaldo necesarios para garantizar su solvencia. El contrato estará a nombre de cada persona y se le puede dar una copia a cada uno. Asegura a cada compañero de habitación los mismos derechos y los mismos deberes.
Además, con un solo contrato de alquiler, los cargos por alquiler y alojamiento no se desglosan de acuerdo con el número de compañeros de habitación. Esto significa que el propietario puede reclamar el acuerdo completo a la vez.
Garantes
Si los inquilinos son estudiantes o personas sin suficientes ingresos, el propietario puede solicitar una o más personas para garantizarlos. Al firmar una fianza, los garantes se verán obligados a pagar el alquiler completo si no se abona.
Cómo gestionar el alquiler de habitaciones con Rentila
Cuando crea el alquiler, puede agregar varios inquilinos. Simplemente haga clic en el botón Agregar inquilino, elija el inquilino y confirme. Más información.